Hace poco un estudio reveló que los amigos que se insultan en tono de broma, especialmente a la hora de jugar videojuegos, pueden ser hasta un 300 % más leales y honestos entre sí. Aunque parezca contradictorio, la realidad es que estas amistades fortalecen la confianza y generan un vínculo más auténtico.
La investigación fue realizada por la Universidad de California, donde psicólogos sociales analizaron la dinámica de comunicación entre amigos a lo largo de cinco años. A través de encuestas y observaciones en entornos sociales, los investigadores concluyeron que el uso de bromas e insultos en confianza refuerza los lazos de amistad, fomenta la honestidad y fortalece la lealtad.
“Los comentarios jocosos fortalecen los vínculos” y generan una confianza más profunda, señalaron los expertos. Este hallazgo no sorprende a quienes han crecido en ambientes donde el humor es una forma de demostrar cariño. En Massachusetts, por ejemplo, esto es algo común, como lo explicó Stacy: “Si no se están burlando de ti, significa que a nadie le importas”.
