Si ya ni siquiera te queda un perro que te ladre, Carolina tiene una solución para ti: La sologamia, y consiste es una práctica en la que una persona se casa consigo misma, celebrando un supuesto amor propio y la autovaloración. Aunque no tiene reconocimiento legal, quienes la han adoptado consideran que es una poderosa afirmación de autoestima que puede conducir a una vida más feliz.
Un caso notable es el de Antoine Cheval, un francés que, tras 17 relaciones fallidas y numerosos rechazos, decidió casarse consigo mismo. Cheval se identifica como “sológamo” y ve en esta unión una forma de compromiso personal y autoconexión más profunda. La sologamia ha ganado popularidad en los últimos años, especialmente entre mujeres millonarias. En Kioto, Japón, una agencia de viajes ofrece paquetes de matrimonio en solitario, atrayendo a clientes que buscan una experiencia de boda única o una segunda oportunidad para sentirse como novias.
En resumen, la sologamia es una tendencia creciente que permite a las personas celebrar su amor propio a través de ceremonias simbólicas, redefiniendo lo que significa encontrar la plenitud en el mundo actual. ¿Te casarías contigo mismo? No sé si me soportaría…
