Un pasajero peruano creyó haber encontrado la receta perfecta para un desayuno de campeones, pero la Aduana de Arica no se dejó engañar. En un operativo de fiscalización basado en el análisis de riesgo, los funcionarios descubrieron que los 73 paquetes de supuesta leche en polvo eran, en realidad, pasta base de cocaína.
El sujeto, quien venía de Tacna con su “compra del mes”, no pudo disimular los nervios y terminó en manos de los fiscalizadores, quienes, con ayuda de rayos X y binomios caninos, destaparon el ilícito menú. Tras el hallazgo, los sobres con leche, ají y chocolate instantáneo fueron analizados y se confirmó que contenían casi siete kilos de droga.
Como era de esperarse, el pasajero terminó en la Unidad de Drogas, donde su “comida sorpresa” no pasó la prueba de calidad. Con la intervención de la Fiscalía y la PDI, el sujeto fue detenido, demostrando que, en la lucha contra el narcotráfico, la Aduana de Arica no se deja endulzar con cuentos sospechosos. ¡Otro decomiso exitoso para la historia!
