Cada 20 de diciembre, el mundo alza sus copas para celebrar el Día Mundial de la Sangría. Desde los campesinos españoles que la preparaban como un remedio sencillo y delicioso, hasta los marineros británicos que transformaron el ron en un cóctel de sabores tropicales, la sangría es una fusión de cultura y creatividad que trasciende fronteras.
Aunque tradicionalmente asociada al verano, su versatilidad ha permitido que países de Sudamérica como Perú y Venezuela también la produzcan y disfruten durante todo el año.