El gobierno japonés ha puesto en marcha un ambicioso plan conocido como “Cool Japan” con el objetivo de cuadriplicar la exportación de sus productos de entretenimiento, incluyendo videojuegos, anime y manga. Este proyecto busca capitalizar el creciente interés global en la cultura pop japonesa y transformarlo en una fuente significativa de ingresos para la nación. Con un mercado internacional ávido por estos productos, Japón ve en esta estrategia una oportunidad única para consolidarse como líder mundial en entretenimiento.
La meta no es solo aumentar la producción y exportación, sino también alcanzar ingresos de 130.000 millones de dólares en la próxima década. Este impulso económico se basará en la riqueza cultural y creativa de Japón, que ya cuenta con un seguimiento masivo a nivel global. El gobierno confía en que al potenciar sus industrias creativas, no solo beneficiará económicamente al país, sino que también reforzará su influencia cultural en el extranjero, posicionando a Japón como un referente indiscutible en la industria del entretenimiento.