Una nueva investigación realizada por científicos de University of Washington, Carnegie Mellon University y Xi’an Jiaotong University revelaron cómo los sesgos políticos se infiltran en los modelos de lenguaje de IA, desde los datos de pre-entrenamiento hasta el procesamiento del lenguaje natural. Para ello se les preguntó a los modelos sobre varios temas sensibles como el feminismo y la democracia.
ChatGPT y GPT-4 de OpenAI mostraron una tendencia más libertaria de izquierda. LLAMA de Meta fue encontrado como el más autoritario de derecha. Por su parte, los modelos BERT de Google mostraron más conservadurismo social frente a los servicios de OpenAl.
La inteligencia artificial es un reflejo de los datos con los que se alimenta, por lo que los libros o información utilizado para entrenarse cobran un papel muy importante. Por ejemplo, los modelos GPT más nuevos se entrenaron en textos de internet liberales, mientras que Google no comparte la información de sus fuentes de conocimiento.
Como sabemos, la IA va a jugar un papel cada vez más importante en la forma en que intercambiamos información y formamos opiniones, por lo que es crucial que seamos conscientes de estos sesgos inherentes.
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